Por: 1996celta ( rosafermu) MADRID / España

domingo, 12 de mayo de 2013

¡ VAMOS RAFA ! (Amalia Enriquez)

"LAS FINALES NO SE JUEGAN, SE GANAN"..

"Oro y brillantes" para Nadal



Que Rafa Nadal es una de mis debilidades es público y notorio. Los que me conocen desde siempre y los que me seguís hace tiempo, me teneis bien tomada la medida y os habeis extrañado de no leer nada sobre él, aprovechando el Madrid Open. Era cuestión de días que escribiera sobre su nueva hazaña."Las finales no se juegan se ganan", dijo después de la semifinal. Y éso es lo que ha hecho, consiguiendo -a sus 26 años- su victoria nº 40 en una final en tierra batida. Un triunfo más es la disculpa perfecta para tenerle, de nuevo, como protagonista de mis devaríos. El tercer trofeo de "oro y brillantes" ya es suyo..

 
  • Rafa NadalEl mar,su otra pasión ( | Foto: Brian Hallett
  
Ya me cuesta encontrar las palabras para definir a este genio de nuestro deporte. Cuánto más le veo, más le disfruto, más le admiro y más me sorprende. Siempre tiene un AS guardado en la manga para enfrentarse al reto que le toque en suerte. No le gusta perder ni a las chapas, pero sabe ser un señor en la derrota que es donde se ve la catadura moral y humana de los competidores. En lo bueno y en lo malo, el mallorquín es "Sir Rafael Nadal".
Nadal golpea de revés ante FerrerNadal golpea de revés ante Ferrer | Foto: EFE

Estareis hartos de oirme decir que es una “droga” que me gusta consumir con toda la frecuencia que me dejan sus torneos “por lo largo y ancho del mundo”,  porque -sin pretenderlo- me hace crecer como persona ,me anima a ser más fuerte, a superarme en los momentos delicados. Verle jugar es un chute de vitalidad. Comprobar que, al igual que los toros bravos se crece ante la adversidad, es una lección de vida.
Nadal, en MontecarloNadal, en Montecarlo | Foto: EFE

Siempre digo que este chico es un ejemplo de superación en época de crisis. La suya ni ha sido ni es económica, pero sí lo fue afectiva y de bajón personal hace un tiempo y física, hace unos meses. Inasequible al desaliento, el manacorí se refugió en su familia, en su discreta relación sentimental y dedicó a trabajar esas rodillas, que le habían apartado de las pistas de tenis. Tras siete duros meses de vida absolutamente monacal, dedicada “en cuerpo y alma” a su rehabilitación, Nadal  -cual Ave Fenix – resurgió de sus cenizas y volvió a ser el de siempre, el luchador, el grande, el número 1…aunque no sea ya ese el lugar que ocupa en el ranking.
Rafa Nadal gana el Master Series Mutua Madrid OpenCelebración en el Master Series Mutua Madrid Open | Foto: EFE

No tengo la menor duda de que Nadal es un héroe de nuestro tiempo. Mucho empeño tendrá que poner el destino para que haya otro como él. Su espíritu de superación debería enseñarse en los colegios como ejemplo de vida. Con tan sólo cuatro años cogió, por primera vez, una raqueta entre sus manos. En un tiempo record ganó su primer torneo y, cuando le preguntaron al final del partido cómo sentía, con la madurez de un adulto respondió que “muy feliz, pero no me debo creer especial ni diferente porque sólo he ganado mi primer torneo”. Ni en sus mejores sueños imaginó que, años más tarde, haría historia ni de la manera que se ha producido.

sábado, 11 de mayo de 2013

JULIA MATOS, española ( Cadena Ser

Una española, candidata al mejor trabajo del mundo

Se trata de un trabajo en el parque natural de Queensland (Australia) con un salario de 12.680 euros al mes con alojamiento y viajes pagados

EFE   11-05-2013
Julia Matos ha conseguido, después de haber competido contra más de medio millón de personas optar a "a uno de los mejores trabajo del mundo" convirtiéndose en la única española entre 25 seleccionados.
     
Matos ya quería irse a trabajar fuera de España junto con su novio cuando un día encontró en Internet, por casualidad, que la Agencia de Turismo Australiana ofrecía seis trabajos relacionados con el turismo en distintos espacios naturales. Cada uno de ellos se ubica en una de las seis regiones de este país, con un salario semestral de 100.000 dólares o, lo que es lo mismo, la increíble cifra de 12.680 euros al mes con alojamiento y viajes pagados.
En cuanto vio la oferta, ha explicado esta joven leonesa de 26 años, decidió optar al trabajo que más se adaptaba a su perfil, el de "Park Ranger", persona encargada de cuidar el entorno natural de Queensland, una región australiana que tiene dos veces el tamaño de España. Aunque la palabra "Park Ranger" puede traducirse en castellano por la de "guardabosques", este trabajo "no es sólo eso", ha añadido Matos, ya que si lo consigues tienes la posibilidad de estar en playas vírgenes y selvas tropicales, en contacto con la cultura indígena o conocer fósiles de dinosaurios.
¿Cómo lo ha conseguido?. Gracias a un "innovador" vídeo de apenas 30 segundos que hizo como carta de presentación en el que condensa la creatividad y fuerza que la caracterizan. Matos, que ha estudiado Comunicación Audiovisual, inunda con desparpajo y gracia un vídeo en el que defiende su candidatura mientras pasea por un huerto recogiendo hortalizas, hace surf subida al capó de una caravana o se pone unas aletas para chapotear en una fuente de un parque que no le cubre ni el hombro.
En una parte del vídeo en la que teclea un ordenador, explica que tanta fuerza no puede encerrarse entre cuatro muros y es que, el trabajo de oficina, no está hecho para esa vitalidad desbordante. "El vídeo que he hecho para que me escogieran es original y las imágenes seleccionadas son bastante impactantes, buscaban algo diferente y visualmente llamativo, yo creo que eso es lo que me ha distinguido del resto", ha relatado.

Hasta el día 8 de mayo, Matos ha buscado la máxima repercusión mediática y social en España para conseguir pasar a la final de la candidatura en la que tres seleccionados irán una semana a Australia para realizar el proceso de selección final.
Para conseguir su propósito Matos ha creado su propia página web, www.juliamatosforaustralia.com, donde cualquier persona puede apoyarla para que consiga la máxima repercusión. La estrategia de movilización de la leonesa "ha sido todo un éxito", la web ya cuenta con numerosos respaldos de particulares que han subido fotos a Facebook con un cartel de apoyo y con vídeos e imágenes de celebridades, como el humorista Florentino Fernández o el deportista Jesús Calleja, entre otros.
"Ahora mismo la gente es muy solidaria con estas iniciativas, el trabajo aquí está muy mal y todos se movilizan para que los jóvenes encuentren trabajo, ya sea en España o fuera", ha subrayado.
Matos está feliz por todo el apoyo que está consiguiendo, puesto que su familia y amigos "se están volcando" con ella dedicándola "muchísimo tiempo" y ayudándola a conseguir una oportunidad "única". "No es ganar un concurso para estar durante seis meses en un sitio maravilloso, es abrir las puertas de nuevos caminos y posibilidades", ha concluido.

miércoles, 8 de mayo de 2013

MARTIN BERASATEGUI 7 ESTRELLAS MICHELIN (Amalia Enriquez)


EL SUEÑO DE MARTÍN BERASATEGUI..

Siete estrellas Michelín

No sé si es producto del puente, que no he disfrutado, o de lo mucho que he tenido que cocinar. El caso es que hoy me ha dado por escribir de alguien que ha hecho de la cocina un arte. Con la disculpa del 20 aniversario de la inauguración de su restaurante de Lasarte, voy a intentar acercaros a un hombre que convirtió un sueño en su bandera vital..

 
Martin Berasategui en su restaurante
Siete estrellas Michelín le contemplan y le convierten en el cocinero español que más reconocimientos posee. Sin embargo, la vanidad ni le roza y la fama es algo que su humildad le impide reconocer. Martín Berasategui es un hombre campechano, tímido, excelente conversador y honesto vasco, que se siente orgulloso de unas raíces que no le han hecho más que crecer como persona. Nació en el seno de una familia normal y su escuela fueron los fogones. “Nací en 1960, en el número 4 de la calle General Echagüe, entre el Puerto de Pescadores y el Mercado de la Brecha. De pequeño veía llegar el pescado, en carros tirados por mulas, desde Igueldo y Ayete. En la puerta se vendían huevos, leche, setas y verduras. Mi infancia transcurrió alrededor de aquel mercado”.
Martín Berasategui7 estrellas Michelín le contemplan.. | Foto: Martín Berasategui

Martin, segundo de cuatro hermanos, es el único miembro de su familia que demostró devoción por las cazuelas e interés por los guisos. Al salir de la escuela, en lugar de ir a jugar al parque con los amigos, corría –sin dudar un segundo-  a EL BODEGÓN DE ALEJANDRO, una entrañable casa de comidas situada en la parte vieja de San Sebastián, que regentaba su padre. “Se llamaba como yo. Era un hombre recto, generoso y que creía en el trabajo en equipo. Esa idea me la supo inculcar. La gran pena que tengo en mi vida es que no me vio triunfar, no me dio tiempo de demostrarle en vida que no me equivoqué al elegir seguir su estela”.
Y es, en este momento, cuando este vasco recio y pequeño pero fuerte, se emociona al recordar el que ha sido –junto a su madre y su tía- el motor de su vida y de su vocación. Enternece comprobar la sensibilidad y arraigo familiar de este grande de la cocina, que ni el éxito, los premios, las alabanzas y “las estrellas” le han arrebatado un ápice de su apego a las raíces que le han ayudado a convertirse en el hombre que hoy es. A los quince años se dio cuenta que lo suyo era la cocina y comprobó que aprendía más charlando con los clientes en EL BODEGÓN que en el colegio, en el que le había matriculado su madre al terminar el bachiller elemental. “ Esa fue mi verdadera universidad. Disfrutaba hablando con los deportistas vascos, periodistas locales, campesinos, pescadores y clientes. Lo que mi padre consiguió en aquél lugar hoy sería irrepetible. En las mesas podías ver a Chillida compartiendo charla con un jugador de la Real Sociedad, por ejemplo. Recuerdo, como si fuera hoy, que a finales de los sesenta –dentro del restaurante- había una cocina de gas que funcionaba con monedas. Los pescadores llegaban sin avisar, de repente, y se preparaban su propia comida al estilo de las sociedades gastronómicas. De aquella yo era Martintxo, el chico que siempre deambulaba por allí”.
Martín BerasateguiHacer de lo sencillo un arte.. | Foto: Martín Berasategui

Sus padres se llevaron un disgusto cuando les dijo que quería ser cocinero “porque la dureza que ellos vivieron no la querían para mí. Sin embargo, lo que a mí me hacía feliz era la universidad de los fogones y no los conocimientos que me transmitían los profesores. Un día de septiembre del 75, mi madre y mi tía me dijeron que si quería ser cocinero, me íba a ir con ellas desde primera hora de la mañana a comprar el pescado y todo lo necesario para el día y que, después, me pasaría toda la jornada con ellas en la cocina hasta que termináramos por la noche. Pensaron que me íba a arrepentir y lo que hicieron fue animarme más a convertir ese mundo en mi vida”.
La suya, en contra de lo que pueda parecer, no ha sido una andadura fácil. Después de salvar mil dificultades, el 1 de mayo de 1993, Martin abre las puertas de su restaurante en Lasarte, al que le pone simplemente su nombre. Fue una aventura de riesgo que le lanzó a la fama. A los seis meses de su inauguración recupera la estrella Michelín de EL BODEGÓN. Tres años más tarde recibe la segunda y en el 2001 le otorgan la máxima calificación de la emblemática guía,tres. “Los años me han demostrado que tengo la fuerza suficiente para crear grupos cohesionados y locales emblemáticos. Soy un entusiasta del trabajo en equipo”, al que pide disciplina (que él también se autoimpone), concentración, afán permanente de superación, derroche de energía personal y valores humanos. Rasgos innegables de un cocinero generoso, que prodiga sin recato sus enseñanzas. “Enseño a las nuevas generaciones y, luego, les dejo que vuelen a su aire. Para dirigir un restaurante como el mío, hace falta capacidad de mando, disciplina y ganas de comunicarse con la gente. Tienes que conseguir que los que te rodean se sientan importantes. Sin control no se consigue nada. Yo exijo porque doy todo lo que tengo a cambio”.
artín Berasategui y Amalia EnríquezSencillez y campechanía como señas de identidad..

A pesar de las excelencias de su cocina, Martín es un hombre de gustos sencillos al que le entusiasman las croquetas, una buena tortilla de patatas, las cocochas rebozadas y los callos bien sazonados. “Como te puedes imaginar, en mi casa cocino yo. Cuando vienen amigos, me hacen compañía mientras yo preparo el almuerzo o la cena. Y, cuando ellos me invitan a mí, siempre les digo que no tienen que preocuparse por el menú. Me gustan las cosas sencillas, los platos de siempre, los que toda la vida han hecho nuestras madres en casa”.
Los que le conocen bien saben que, como mejor se expresa, es a través de sus propios platos. Es como esos artistas incapaces de explicar cómo son los trazos que tienen que dar para llenar su lienzo en blanco. Tal vez por ello, cuando le preguntas por su estilo de cocina, sobre su manera de innovar, siempre recurre a frases relacionadas con sus sentimientos. “Mi cocina es el reflejo de mi paladar, de mi sensibilidad y de muchos pequeños sueños. Primero pienso cómo quiero rematar un plato y luego busco el sistema para conseguirlo. Un cocinero debe asumir que una parte importante de su trabajo consiste en pensar. La creación de un plato arranca en la cabeza”.
Martín Berasateguunos chipirones de premio.. | Foto: Martín Berasategu

Y en esa parte privilegiada de su creatividad en donde Martín ha ideado todos esos platos, que han creado escuela, que han innovado la cocina y que le han convertido en un gurú de la gastronomía. Si le preguntas por su plato fetiche, aunque reconoce que es difícil elegir porque cada uno de ellos tiene un motivo para ser especial, se decanta sin dudarlo por  el “CALDO DE CHIPIRÓN SALTEADO CON SU CRUJIENTE Y RAVIOLI CREMOSO RELLENO DE SU TINTA”. Propuestas como ésta son las que han conseguido esas siete estrellas Michelín (la última este mismo años), que ya nadie le va a arrebatar. ““La Guía Michelin me ha convertido en el hombre más feliz del mundo. Les estoy inmensamente agradecido. En estos momentos de reconocimiento, quiero agradecer el apoyo de mi equipo. Valoro inmensamente su esfuerzo y entrega. Estar a la vanguardia de la cocina, ser creativo y dedicarme en cuerpo y alma a mi profesión ha sido siempre mi objetivo. Mi éxito es el resultado del afán de superación, la honestidad y nobleza en todos los aspectos. Todos los cocineros soñamos con una estrella. Yo he mantenido las seis y he conseguido otra más. Lo importante es el futuro, tener los pies en la tierra y trabajar”.
Martín Berasateguila "familia" Berasategui al completo.. |